Rabat declarada Patrimonio Cultural Mundial

Durante la última reunión de la UNESCO celebrada en la ciudad rusa de San Petersburgo, el Comité del Patrimonio Mundial ha decidido incluir a Rabat, la capital de Marruecos, en la lista de patrimonios mundiales culturales reconocidos por la UNESCO. 

El conjunto arqueológico de Chellah, la Kasbah de los Oudayas, la muralla, los muros y puertas Almohades, la mezquita de Hassan, la Medina, la ciudad nueva y el Mausoleo de Mohammed V han sido reconocidos como importantes legados de la ciudad de Rabat abogando por su protección y conservación.

Medina de Rabat

La ciudad también es ahora más accesible para los visitantes extranjeros: la inauguración de una nueva terminal de su aeropuerto en enero de 2012 que acogerá anualmente a 1,5 millones de pasajeros. 

Desde 1975, la Organización de Naciones Unidas identifica y protege lugares o monumentos extraordinarios de Marruecos que tengan un valor excepcional para la humanidad. Al Norte, se puede admirar la incomparable Medina de Tetuán, seleccionada por la UNESCO por haber conservado intacto su estilo único, mezcla de influencias andaluzas y árabes.

Objetivo Volúbilis. Retome la ruta hacia el Sur y deténgase en Meknes, ciudad imperial y amistosa. Esta impresionante urbe del siglo XI y su espectacular arquitectura mestiza están inscritas en el registro desde 1996. A pocos kilómetros, podrá contemplar los destacables vestigios de la ingeniería urbanística del Imperio Romano. En efecto, Volubilis es el lugar antiguo más importante de Marruecos, el mejor conservado y el más evocador...

Ruinas de Volúbilis

La medina de Fez, con aires ancestrales pero siempre llena de vida, también forma parte de la selección de la UNESCO. Fue el primer emplazamiento marroquí en integrar la lista en 1981, con un urbanismo inspirado en el Islam, es un modelo en su género.

Patrimonio mundial.  Otros dos lugares de prestigio se encuentran en la costa atlántica: la antigua ciudad portuguesa de Mazagan y la medina de Essaouira. Finalmente, en el centro el país, la suntuosa plaza de Yamaa el-Fna de Marrakech y la asombrosa ciudad fortificada (o ksar) de Aït-Ben-Haddou, en la región de Ouarzazate. De este modo, todas las regiones marroquíes poseen al menos una clasificación de la UNESCO, por tanto, adonde quiera que venga en Marruecos, sepa que tendrá muy cerca alguno de los prestigiosos lugares de la humanidad.
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